The Room Next Door
Pedro 0,0
SAN SEBASTIÁN 72


¡No me lo podía creer, amigos critikones, no me lo podía creer!
No solo se trataba de la primera vez que iba a ir al festival de San Sebastián, sino que también coincidía que el premio Donostia se lo iban a entregar a… ¡Pedro Almodóvar! ¡Que además había estrenado su primera y esperadísima película en inglés! ¡Y lo había hecho en el festival de Venecia! ¡¡Y había ganado el León de Oro!! ¡¡¡Y yo tenía entradas!!! ¡¡¡¡En Primera Fila!!!!
Bueno, había emoción y expectativas por mi parte, sí, pero no tantas. El párrafo de arriba lo ha escrito mi yo de los 15 – 18 años, momento en el que Almodóvar era mi director favorito, de quién he visto toda su obra, tanto sus 23 películas como todos sus cortometrajes. Obra la cual, está atravesando una etapa más fría y psicologista con la que me siento un poco distanciado y, por ese motivo, tenía cierto miedo a su nueva entrega.
La ceremonia del premio Donostia fue preciosa, un lujo poderla ver en primera fila. Discurso de Tilda Swinton en inglés, entrega del premio a Pedro y discurso del mismo (En el cual dijo que, aunque llegase a una edad en que el cuerpo y la cabeza no le acompañasen para hacer buenas películas, él seguiría haciendo cine, aunque fuese malo… eso es amor), además estuvo arropado por algunos de los actores de reparto de su nueva película; Juan Diego Botto, Melina Matthews, Victoria Luengo y Raúl Arévalo.
Acto seguido, se proyectó, por primera vez en España, la ganadora del León de Oro a mejor película en Venecia y una de las más esperadas de la temporada; “The Room Next Door” (2024)
En esta ocasión, Almodóvar da el protagonismo de su nueva historia a Ingrid (Julianne Moore) y a Martha (Tilda Swinton), dos mujeres de sesenta años que fueron muy amigas en su juventud. Ambas trabajaban en la misma revista, pero Ingrid acabó convertida en novelista de autoficción y Martha en reportera de guerra. Las circunstancias de la vida las separaron y, después de muchos años sin tener contacto, vuelven a encontrarse cuando Martha atraviesa los últimos días de su vida debido a un cáncer que se ha descontrolado, y le pide a Ingrid que le acompañe en su final.
Creo que el tema de la muerte digna, como dijo el crítico Carlos F. Heredero en su crítica a “Le Dernier Souffle” (2024), nos afecta a todos queramos asumirlo o no, estemos a favor o en contra, pues en algún momento de nuestra vida vamos a dejar de vivir para pasar a otra situación que desconocemos por completo.
Por esto mismo, el tema que plantea la nueva película del cineasta manchego debería haberme conmovido o, por lo menos, removido. Nada de eso. Muy a mi pesar he de decir que ni si quiera me deja frío, que ya habría sido algo, sino que me deja tibioDesconozco el libro en el que se ha basado Almodóvar, pero como hablé con un amigo y compañero, siento que Pedro ha incrustado ciertos pegotes en el guion sobre temas con los que milita; el cambio climático, la guerra y el rechazo a extrema derecha.
La película tiene un arranque pausado, lo cual no habría sido nada malo si después se produjese un crecimiento dramático, el problema es que no me parece que lo haya. A medida que va avanzando la película no se producen grandes obstáculos, ni entre los personajes y su objetivo ni entre ellos mismos. Por ejemplo, cuando Martha le hace la proposición a Ingrid esta dice que no, se sube a un taxi en el que parece reflexionar un poco y acto seguido, en la siguiente escena, hace una llamada a Martha para decirle que ha cambiado de idea. ¡Así de fácil hace Pedro que los personajes superen un obstáculo!
Y la única discusión que hay entre las dos amigas no llega a mayores y se resuelve en un instante.
Como dijo un amigo mío, en las películas que Pedro hace ahora ya nadie grita.
Respeto la nueva etapa de Almodóvar, pero parece que ya quedaron atrás los momentos que tanto amé; ese “¡Riégueme!” de Carmen Maura, Esa noche llena de transexuales, el consumo de drogas desenfrenado, el “¡Qué heavy eres Juana!”, Andrea Caracortada, el Mambo taxi… ahora, entre los cuatro márgenes de la pantalla desfilan adultos que pasean por el parque y conversan, escritores que preparan su nuevo libro, antiguos amantes aburguesados que comparten una botella de vino en un lujoso restaurante… Ojalá Carmen Maura irrumpiese en ese restaurante y le abriese la cabeza a los personajes con una pata de jamón.
En definitiva, una película tibia que, aunque plantee un tema interesante, parece haberse olvidado de establecer los conflictos del mismo y no los confronta.
Lo Mejor: El personaje de Ingrid. Con una forma generosa de ver la vida y muy bien interpretada por Julianne Moore.
Lo Peor: Los flashbacks innecesarios.
Te gustará si te gustó: "Tout s'est bien passé" (2021) Dir. François Ozon
Nota:

